lunes, 9 de mayo de 2011

Este poema nació de alguna etapa o momento, en donde sola en tu habitación, miras tu entorno y te sientes insatisfecha, sientes que buscas algo más que lo que ves alrededor tuyo.

¡ALTO!     

Cuando el tiempo es trabajar, producir, cosechar
Cuando tus días son números, cifras y calcular
Y tu atención es sólo invertir en lo material…
¡Detente, respira y mírate!
¿Eso es todo, no hay nada más?

Si cada vez que se habla para aclarar
La conversación termina, hundiéndose en la oscuridad…
¡Detente, respira y mírate!
¿Eso es  todo, no anhelas nada más?

Satisfecho, henchido; está tu andar
Por caminos asfaltados de realidad
Lo que vale, se mide en pesos
Acaso muy adentro… ¿No piensas eso?

Si tan sólo un minuto, pusiera valor a la lealtad
Si tuvieras tiempo para calcular la amistad
Si invirtieras un poquito en delicadeza y atención…
Cosecharías siempre el más preciado don:
“Aquellos que tuviste, te amaron por dos”


No hay comentarios:

Publicar un comentario